El hijo de Hernán Cortes intenta independizar Mexico

Después de la conquista de México, casi todos los soldados que acompañaron a Hernán Cortes se establecieron en el país. Recibieron encomiendas y se convirtieron en grandes terratenientes, de ahí nacieron los primeros mexicanos, blancos y también mestizos. En la década de 1560 la sociedad mexicana ya era plenamente colonial. El país estaba pacificado y era rico en recursos que disfrutaba una elite española de primera generación, y sus hijos.

Unos de estos hijos de conquistadores eran los hermanos Ávila. Su padre era el conquistador Gil González Benavides, que acompañó a Hernán Cortés en la conquista de México. Estaban muy preocupados por las leyes de 1540 que suprimían las encomiendas, aunque  esta ley todavía no había aplicado a Nueva España.

Las encomiendas se habían aLas encomiendas se habían adjudicado solo a la primera generación de conquistadores y sus hijos tenían la obligación de devolverlas a la corona. Se hacía para evitar un poder feudal como en la edad media, se estaba pasando del sistema feudal al capitalista a través del mercantilismo.

En 1563 regresa a México Martín Cortés Zúñiga, hijo de Hernán Cortes y dueño de los más grandes latifundios de México. Martín y los hermanos Ávila junto a otros encomenderos son la Alta Sociedad de la época. Se relacionan y hablan de sus problemas con esa ley que pretende quitarle sus posesiones.

En 1564 muere el virrey Luis de Velasco y el cabildo de México bajo recomendación de los encomenderos nombra a Martin capitán general de la Nueva España y por tanto la persona con más autoridad a la espera de un nuevo virrey.

el bautizo de los hijos gemelos de Martín. Adornaron la plaza mayor de la ciudad de México con un bosque artificial y el banquete duró ocho días.

En una de esas noches, los principales invitados se disfrazaron de nobles aztecas y colocaron sobre las cabezas de Martin y su esposa dos coronas de laurel y los alabaron como reyes de Nueva España.

Martín encabezó el plan que consistía en asesinar a los altos funcionarios (visitadores y oidores) leales a la corona, quemar documentos reales y tomar el puerto de San Juan de Ulúa. Luego, su hermano también llamado Martin, hijo de Hernán Cortés y La Malinche, tomaría la ciudad de Zacatecas, rica en plata.

Después nombrarían a Martin rey de Nueva España y uno de los encomenderos iría a visitar al Papa para regalarle grandes cantidades de plata para que reconocieses el nuevo estado.

Pero todo el plan se desmoronó pronto porque uno de los encomenderos, reveló los detalles a la Audiencia y poco a poco empezaron las detenciones de los encomenderos.

Uno de esos fiscales era Francisco de Sande, del que ya hablaremos en otro artículo. 

Martín y sus hermanos fueron detenidos, si bien el único que sufrió la tortura del potro y agua fue su hermano Martín el mestizo. A los tres los condenaron a muerte pero la sentencia nunca llegó a ejecutarse. Pesaba demasiado su apellido y les cambiaron la pena por la expulsión a la península. A los demás encomenderos encausados los ejecutaron como también hicieron con los principales conspiradores, los hermanos Ávila. Después de haber sido ejecutados exhibieron sus cabezas clavadas en pica durante meses para recordar que a la corona se respeta.